Cómo iniciarse en el trail running

04.05.2022

Cada año se suman más corredores al monte llegados de otros deportes, corredores de asfalto, ciclistas, senderistas... o gente que simplemente le gusta la montaña y quiere experimentar correr por sus entornos más cercanos o conocer lugares nuevos corriendo. Iniciarse en el trail requiere de una preparación específica, como todo deporte, al que hay que dedicarle tiempo para no tener lesiones y poder disfrutar al máximo de esta nueva aventura.

Antes de lanzarte a las carreras explosivas como los kilómetros verticales, a los maratones de montaña o a la ultra distancia, hay que comenzar eligiendo distancias cortas que no superen los 20 kilómetros y con trazados no demasiados técnicos y desniveles asumibles, que nos exigía un esfuerzo moderado y donde se pueda combinar el famoso CACO (caminar y correr.

En montaña hay que prestar mucha atención a la preparación y a todos los factores antes de salir a correr por la montaña, seas principiante o no lo seas.

No está demás que te hicieras un reconocimiento médico deportivo en el que se valore la salud cardiovascular como músculo-esquelética, incluyendo un electrocardiograma en reposo, además de una evaluación general asegurarnos de nuestro buen estado para entrenar y competir.

Lo siguiente sería tener un plan de entrenamiento guiado por un profesional que nos ayude a ir progresando semana a semana, que contemple no solo salidas al monte, sino también días de series, entrenamientos cruzados, ejercicios de fuerza, de técnica de carrera y de propiocepción y días de descanso...

Un factor muy importante es el material que debes usar, ya que estamos hablando de montaña y por ejemplo las zapatillas no nos valen las de running o las de senderismo, sino unas específicas de trail que tengan buen agarre, estabilidad y que transpiren bien. Además del calzado es muy importante también el resto de ropa y complementos, ya que en la montaña la climatología condiciona mucho nuestra actividad. Así, en condiciones de calor, ropa que transpire y elimine el sudor rápidamente, gorra y gafas para protegernos del sol. Con frío, acordarse de las tres capas: la interior que ayuda a evacuar el sudor, la intermedia que nos protege del frí­o y la exterior que nos aísla de viento, lluvia o nieve. Además usar guantes, protector para el cuello, y mallas o pantalones largos si el clima lo precisa. Y no debemos olvidarnos de protegernos la piel con uso de cremas solares con protección alta ya que estaremos en muchas ocasiones en zonas expuestas.

En cuanto a los complementos, en algunos momentos tendremos que usar bastones, especialmente en las subidas, pero es algo que debemos entrenar previamente para que el día de la competición sume su uso, y no nos penalice por no saber usarlo. Los bastones ahorran energía en las piernas en las subidas y nos ayudan a amortiguar las bajadas.

Igualmente importante es contar con un reloj donde no sólo conocer todos los detalles de nuestros entrenamientos y competiciones posteriormente, sino que en muchos casos podemos descargarnos el track previamente de las rutas que haremos y así estaremos seguros y localizados en todo momento. Obligado también llevar teléfono móvil cargado y si la tirada va a ser larga, usar mochila donde incluir manta térmica, sistema de hidratación -agua y dales minerales mínimo- y algo de comida en función de la actividad que desarrollemos.

Ahora que ya tienes los básicos controlados, es hora de elegir carrera. Como comentamos al inicio lo mejor es empezar con pruebas que no superen los 20 kilómetros y con poco desnivel o asumible.